La semana pasada asistimos a la Exposición “CICLOS” de José Miguel García Agustín.
La experiencia de 38 años ejerciendo la profesión de arquitectura le da una perspectiva fundamental al desarrollo de su carrera como escultor, aplicando un estilo contemporáneo y urbano. La visión como arquitecto y la experimentación con la línea, el espacio y la luz da como resultado la creación de GAAG esculturas.
Tuvimos la oportunidad de hacerle una pequeña entrevista para conocer de primera mano cómo trabaja y aquí os la traemos en primicia.
  1. ¿Cuál fue tu primer encuentro con el arte de la escultura y qué te inspiró a seguir este camino creativo? 

Desde la adolescencia siempre he tenido la necesidad y la curiosidad de observar, empezando por la naturaleza hasta los edificios que me han rodeado, siempre mirando en todas direcciones. 

Una vez elegida la carrera de arquitectura muchas de las asignaturas están relacionadas con el arte, como expresión gráfica, geometría, análisis de formas, historia del arte y de la arquitectura y composición. 

El ejercicio de la profesión de arquitecto fue el punto de partida desde hace 13 años para lanzarme de una forma más continuada a la escultura, la afición por el diseño, la estética, los detalles, el arte me han permitido crear las esculturas con libertad de expresión.

Como el arquitecto y el escultor que soy, me expreso creando volúmenes y conformando espacios, jugando con la luz, las sombras y los volúmenes tanto llenos como vacíos.

  1. ¿Qué técnicas y materiales prefieres utilizar en tus esculturas y por qué?

Empezando por el esbozo, generalmente dibujado y mediante un proceso º de tallado, vaciado, modelado por desbastado y pulido, fino o basto.

El materia principal y característico en mis obras y utilizado desde el inicio es el “solid surface”, un  material cálido al tacto y similar a la piedra natural; este material está compuesto por dos terceras partes de minerales naturales (ATH: Trihidrato de Alúmina) y un bajo porcentaje de resinas de gran resistencia. Al que he ido incorporando materiales más naturales como la madera, siempre reciclada de talleres de carpintería o de derribos, planchas y/o esferas de aluminio, frecuentemente estos materiales son reciclados.

Y el porque es por ser materiales y técnicas que tienen que ver con el ejercicio de mi profesión de arquitecto, como por ejemplo el “solid surface” se utiliza en encimeras de cocina, muebles de baño y revestimientos de fachada.

  1. Tu trabajo parece fusionar elementos de la naturaleza con la creatividad humana. ¿Qué papel juega la naturaleza en tu proceso creativo?

En el ejercicio de la profesión de arquitecto soy escultor de la luz, creando espacios, donde la naturaleza es un elemento más en la inspiración de las obras, no siempre es el principal. 

La observación e interpretación es parte fundamental en mi proceso e inspiración de trabajo, la naturaleza, la belleza, los sentimientos y emociones etc. son varios de los elementos que me inspiran cada uno a su manera en cada momento. Por ejemplo, en las exposiciones “Mar y montaña” y “Universos” la naturaleza cobró un papel fundamental siendo la fuente de inspiración. 

  1. ¿Cómo defines tu estilo artístico y qué intentas transmitir a través de tus obras?

Dicen que definirse es limitarse, dicho eso si me gustaría que se me reconociera como comprometido, apasionado, innovador, en búsqueda del equilibrio, el orden y el detalle y también divertido.

A través de mis obras me gusta lograr experiencias en los espectadores dejando volar su imaginación e interpretación, percepción propia, estilo y elegancia. 

Una experiencia no solo de belleza sino también de empatía y de evocación.

  1. Valencia es conocida por su rica historia cultural y artística. ¿De qué manera influye esta herencia en tu trabajo como escultor?

Lógicamente la luz, los edificios y los artistas locales de todas las épocas son la base fundamental de mi poso cultural y creativo. La influencia es consciente pero sale inconscientemente en cada una de las obras.

Hay muchos escultores tanto Valencianos  y del resto de España como Nassio Bayarri, Julio González, Chillida, Manuel Boix, Andreu Alfaro, Miguel Navarro, Willy Ramos, Vicente Ortí  y Antonio Sacramento entre otras decenas que son fuente de inspiración y aprendizaje.

  1. ¿Hay algún tema o concepto recurrente en tu obra? ¿Por qué te sientes atraído por este tema en particular?

Las esculturas no existen en aislamiento. Son parte de un ecosistema artístico más amplio: galerías, museos, críticos, coleccionistas o meros observadores/visitantes. El ecosistema es un tejido interconectado que nutre y sostiene la creatividad.

El movimiento, las esculturas no son estáticas; respiran con la luz, el espacio y el espectador. A lo largo del día, cambian su apariencia, revelando diferentes ángulos y matices. 

  1. Cuéntanos sobre la inspiración detrás de tu última exposición, “Ciclos”, donde exploras los ciclos de la vida a través de la escultura. ¿Qué te motivó a abordar este tema en particular?

Un ciclo evoca el movimiento eterno de la existencia, un ritmo incesante que nos envuelve y nos guía.

Como escultor/arquitecto, me sumerjo en la esencia de las esculturas  explorando algunos de esos ciclos que tejen mis obras.

Esta exposición es un viaje a través de los ciclos que dan vida a las esculturas, un tributo al tiempo, la naturaleza y mi visión de belleza y significado.

  1. ¿Cómo crees que tu trabajo en la exposición “Ciclos” refleja tu evolución como artista y tu visión del mundo en este momento de tu carrera?

Utilizando distintos recursos o herramientas para crear, emocionar, hacer sentir e intentar llegar al espectador, que es, en definitiva, el gran reto. En la arquitectura hay unos problemas que resolver, con una finalidad/función para promotor con sus necesidades específicas. La escultura posee mayor autonomía, además de formar una expresión emocional y personal también requiere de un espectador final con el que se establece una conversación. Los dos campos beben el uno del otro, compartiendo recursos en ambas direcciones, ambos plantean preguntas y ambos ofrecen respuestas.

 

La entrevista con José Miguel García Agustín sobre su última exposición “CICLOS” nos brindó una mirada íntima a su proceso creativo y las inspiraciones detrás de sus obras. A través de su arte, Agustín nos invita a reflexionar sobre la naturaleza cíclica de la vida y el paso del tiempo. Su exposición no solo ofrece una experiencia estética, sino también una oportunidad para la introspección y la contemplación sobre la existencia humana.