Especial día de la mujer con Gae Aulenti y su icónica lámpara Pipistrello

Hoy hablamos de Gae Aulenti, una de las muchas mujeres que han hecho historia. En los tiempos que corren estamos aprendiendo a dar valor a las mujeres en otros ámbitos que no sean la familia y el hogar. Nuestra luchadora a la que hacemos homenaje hoy en el día de la mujer es una diseñadora, arquitecta y escenógrafa que ha dejado huella a nivel mundial: Gae Aulenti.

Gae Aulenti: arquitecta italiana de fama internacional, así como en la escenografía teatral y diseñadora industrial

Ella entendía que para diseñar eficazmente los ambientes domésticos, se hacía necesario entablar un diálogo con los elementos y cualidades del entorno urbano. De esta forma, se podrían generar formas arquitectónicas en las que los ámbitos privado y el público compartieran su complejidad formal y estilística. Ahora toca conocer un poco más sobre su inicios y consolidación de su carrera.

Historia de Gae Aulenti

De familia trabajadora y clase media italiana, Aulenti empieza sus estudios en el Liceo artístico de Florencia pero a causa de la Guerra debe volver al norte. Durante este tiempo, presta pequeños servicios a la resistencia, un movimiento armado de oposición al fascismo y a las tropas de ocupación nazis instaladas en Italia durante la Segunda Guerra Mundial.

Primeros años de Gae Aulenti

En 1954 al fin logra licenciarse en la Facultad de Arquitectura de Milán, tras lo cual empezó su colaboración con la revista, Casabella, de tirada mensual y con sede en la ciudad donde se acababa de graduar. Esta colaboración le ayudó mucho a crecer profesionalmente, ya que se trataba de una revista creada en 1928 por Guido Marangoni y dedicada exclusivamente a publicaciones sobre arquitectura en Italia y en el resto del mundo.

Consolidación de su carrera

Tras años de trabajo en Casabella, también formó parte y trabajó para otras publicaciones. Así es como se hizo miembro del Comité de Dirección de la revista Lotus International.

Pero además, la diseñadora siempre tuvo tiempo para más, y se labró una larga carrera de 60 años de forma independiente. Así pues trabajó en proyectos de arquitectura, diseño industrial, diseño de interiores e incluso escenografía teatral. Este último oficio lo trabajó desde 1976 hasta 1978 junto con Luca Ronconi en el Taller de Diseño de Teatro de Prato.

Otros logros profesionales

La diseñadora y arquitecta italiana Gae Aulenti siempre trabajó de forma independiente, no obstante, compaginó estos proyectos con otros trabajos. Así pues, tras obtener el doctorado se dedicó a la enseñanza en la Escuela de Arquitectura de Venecia, desde 1960 hasta 1962. Posteriormente pasó a formar parte del elenco de profesores en la Escuela de Arquitectura de Milán, trabajo que realizó desde 1964 hasta 1967.

Además en 1984 fue nombrada corresponsal de la Academia Nacional de San Luca de Roma, mientras que desde 1995 hasta 1996 fue presidenta de la Academia de Bellas Artes de Brera.

Aulenti decía que es necesario ver la arquitectura en estrecha relación e interconexión con el entorno urbano existente. Así pues remarcó que ella misma se estaba convirtiendo casi en su generación de forma, buscando, con ello, trasladar su espacio arquitectónico en la multiplicidad y la intensidad de los elementos, y así definir el universo de la ciudad.

A continuación os presentamos algunos de sus proyectos tanto a nivel arquitectónico como de diseño industrial. ¡No te puedes perder lo mejor de esta talentosa artista!

Los emblemas e iconos del diseño de Gae Aulenti

Como la mayoría de diseñadores, hay piezas que pasan a la historia y son recordadas siempre. No solo por su original diseño sino en muchos casos también por otras novedades que se incorporan en ellos y los hacen diferenciarse y hacer historia. Así pues Gae Aulenti cuenta con varios diseños icónicos a lo largo de su amplia trayectoria. ¡Veamos algunos de los más relevantes!

Empezamos con nuestro favorito la Pipistrello, una lámpara de sobremesa de la firma Martinelli Luce. Diseñada por la artista en 1965, fue uno de sus diseños más reconocidos, que se vende hasta hoy en día.

Tal es el éxito de esta lámpara que hasta Pedro Almodovar, cineaste y también coleccionista de obras de arte y diseño, no solo la utilizó para la escenografía de una de sus películas: Dolor y Gloria, sino que también pasó a formar parte de su colección.

Sin duda, es toda una obra de arte, funcional, elegante y con mucho estilo, como su diseñadora.

Otra pieza que nos encanta es la Lámpara de sobremesa Patroclo diseñada para la firma de luminarias Artemide. Se trata de una obra muy peculiar, cuenta con un diseño elegante de cuerpo de vidrio soplado transparente con un difusor parcialmente cubierto por una estructura de metal romboidal irregular.

Su elaboración es compleja e inusual. Un diseño donde el armazón se crea mediante la soldadura de alambre de acero al vidrio resistente al calor que se sopla dentro de la caja.

Sin duda, Aulenti, era maravillosa, una ingeniosa diseñadora y excelente arquitecta. A continuación te citamos algunas más de sus productos estrella: la silla April, lámpara Giova, mesa Tavolo con ruote o la Tour diseñada en 1993.

Las obras arquitectónicas de Gae Aulenti

Aulenti es conocida como arquitecta por una serie de obras en especial los museos que realizó durante la década de los 80. Quizá el más importante fue su proyecto de 1981 en que el reformuló la vieja estación de trenes Orsay en París, diseñada por Victor Laloux, y la convirtió en el actual Museo de Orsay.

Gracias a este primer gran trabajo logró otros de gran relevancia como la construcción del Pabellón de Italia en la Exposición Universal de Sevilla 1992. También se le encargo crear un espacio para el Museo Nacional de Arte Moderno en el Centro Georges Pompidou de París.

Por otro lado la arquitecta italiana se encargó ni más ni menos que de la restauración del Palazzo Grassi, actual museo de arte en Venecia. Y así fue como Aulenti, poco a poco se especializó en reconvertir espacios, tales como una antigua embajada italiana en Berlín que terminó convirtiendo en la Academia de Ciencias. Otro ejemplo sería la reforma del Palacio Nacional de Montjuïc en Barcelona, actual Museo nacional de Arte de Cataluña.

Y también saltó a otro continente pues en San Francisco, EEUU, convirtió la Biblioteca Central de la ciudad en un museo de arte asiático. Lo cierto, es que cada uno de estos trabajos fue realizado con sumo cuidado, siempre pensando en lograr que tanto ámbitos privado como el público compartieran su complejidad formal y estilística

¿Quieres conocer a más mujeres del mundo del diseño? ¡Cuéntanos quienes son tus favoritas!